En el sistema legal español, el delito de alzamiento de bienes es una práctica ilícita que busca evitar el cumplimiento de obligaciones económicas. Este perjudica a los acreedores y pone en riesgo la integridad del crédito. Dicho comportamiento, tipificado en el Código Penal español, se considerado un delito que puede acarrear penas de prisión y multas.
En este artículo, exploraremos en detalle el concepto de alzamiento de bienes, sus implicaciones legales y las consecuencias para aquellos que lo perpetren.
Alzamiento de bienes
El alzamiento de bienes es una forma de fraude que busca evitar el cumplimiento de responsabilidades económicas.
Este mecanismo fraudulento puede adoptar diversas formas. Entre ellas, se encuentran la transferencia de bienes a terceros, la creación de cargas o gravámenes ficticios sobre el patrimonio o la ocultación de activos para dificultar el embargo o el cumplimiento de una deuda.
Qué es un alzamiento de bienes
El delito de alzamiento de bienes sucede cuando una persona intenta ocultar, transferir o disponer de sus bienes para evitar que sean utilizados para el pago de deudas u obligaciones pendientes.
Este delito no se produce solo en aquellas situaciones en las que una persona trata de ocultar o transferir bienes ante la posibilidad de ser embargado. Para que se considere un caso de alzamiento de bienes, el deudor debe realizar actos que dificulten la ejecución de una deuda o perjudique a los acreedores.
Delito de alzamiento de bienes
El Código Penal español, en su artículo 257, establece las bases legales para sancionar el delito de alzamiento de bienes.
Se considera delito cuando una persona realiza actos de disposición o crea obligaciones patrimoniales que dilatan, dificultan o impiden la eficacia de un embargo o procedimiento ejecutorio contra ella. La intención detrás de estos actos es perjudicar a los acreedores o cualquier otra persona con un interés legítimo en la satisfacción de la deuda.
Para que se configure el delito de alzamiento de bienes, es necesario que concurran ciertos elementos:
- Actos Dispositivos: La realización de actos que implican la disposición de bienes patrimoniales, como la venta, donación o traspaso de propiedades, o la creación de gravámenes sobre ellos.
- Perjuicio a Acreedores: Estos actos deben causar un perjuicio a los acreedores, dificultando o impidiendo la satisfacción de sus créditos.
- Intención Fraudulenta: La realización de los actos debe tener una finalidad dolosa, es decir, con la intención de evitar el pago de deudas u obligaciones pendientes.
Cómo demostrar un alzamiento de bienes
Para demostrar un alzamiento de bienes, es necesario presentar pruebas que respalden la comisión del delito. Dado que el alzamiento de bienes implica actos de disposición o transferencia de patrimonio con la intención de eludir el cumplimiento de obligaciones, algunas de las pruebas que pueden ayudar a establecer este delito incluyen:
- Documentación Financiera: transferencias de propiedades, cuentas bancarias, contratos de venta, donaciones….
- Comunicaciones Escritas: correos electrónicos, mensajes de texto, cartas o cualquier otra prueba.
- Testimonios y Declaraciones, que puedan confirmar los actos de alzamiento de bienes o la intención fraudulenta detrás de ellos.
- Registro Público de la Propiedad, que verifiquen si ha habido transferencias de bienes registradas a nombres de terceros, o si se han constituido gravámenes u otros derechos sobre los mismos.
- Análisis Patrimonial del presunto responsable para identificar discrepancias o inconsistencias que puedan indicar el ocultamiento de bienes.
- Peritajes y Valoraciones, para demostrar su verdadero valor y evitar la manipulación de cifras.
- Relación de Causa y Efecto.
- Antecedentes y Conducta: historial financiero y acciones anteriores del presunto responsable.
La carga de la prueba recae en el acusador. Este debe demostrar de manera fehaciente que se han cometido actos de alzamiento de bienes con intención fraudulenta. Si se logra demostrar la comisión del delito, la persona involucrada puede enfrentar las consecuencias penales y civiles correspondientes según lo establecido en la legislación española.
Es fundamental que las pruebas recopiladas sean legítimas y hayan sido obtenidas de manera legal. Para presentar adecuadamente las pruebas ante un tribunal o autoridad competente, se recomienda buscar asesoramiento legal de un abogado penalista.
Cómo defender un alzamiento de bienes
El artículo 257 del Código Penal castiga el delito de alzamiento de bienes en España con penas de prisión de uno a cuatro años y multas de doce a veinticuatro meses. Además, el condenado podría estar obligado a indemnizar a los acreedores perjudicados por los actos de alzamiento.
Este delito es perseguible de oficio. Por tanto, la acción penal puede iniciarse sin necesidad de que el perjudicado presente una denuncia. Las autoridades competentes pueden actuar de oficio ante indicios de este delito, como resultado de investigaciones o diligencias realizadas por órganos judiciales o fuerzas de seguridad.
La mejor manera de resolver la situación es afrontarla de manera responsable y cumplir con las obligaciones económicas de acuerdo con la legislación vigente. En caso de insolvencia, existen leyes específicas que pueden permitir a los deudores solicitar la protección legal, como los procedimientos concursales. Por supuesto, debe evitarse generar nuevas deudas mientras se busca una solución para las actuales, para no agravar aún más la situación.
Ante un caso de alzamiento de bienes, se debe consultar con un abogado penalista especializado en este delito. Mustafa Ortega Molina, abogado penal director del despacho M Abogados se encuentra entre los mejores abogados penalistas de España. Si deseas obtener información precisa sobre el delito de alzamiento de bienes no dudes en consultarnos.